jueves, 11 de agosto de 2011

Noticias extrañas


Diputado neozelandés propone castigar a suicidas después de muertos
Un diputado del Parlamento de Nueva Zelanda, el maorí Te Ururoa Flavell, propone castigar a los jóvenes suicidas después de muertos, a fin de evitar que otros sigan ese ejemplo. “Si un muchacho se suicida, no se debería celebrar su entierro; quizá, como mucho, enterrarle en la entrada del cementerio para que su autoasesinato sea condenado así de alguna manera”, comentó en el diario Rotorua Daily Post.

“Se deben imponer este tipo de penas, para demostrarles lo profundo que llega el disgusto a la gente que se queda. Sí, es duro. Pero ¿qué podemos hacer, si no?”, agregó el diputado. Te Ururoa Flavell propuso esta idea para combatir las altas tasas de suicidio entre gente joven que tiene el país, según refiere la citada publicación


Tenía una espada incrustada en la frente 
Un joven de 15 años tuvo que ser intervenido quirúrgicamente porque tenía incrustada una espada en la frente. La hoja de la espada se incrustó 5 cm en la frente de Zhang Bin, cuando estaba jugando con sus amigos en casa. El muchacho de 15 años de edad, fue trasladado de urgencia a un hospital local, pero los médicos no podían curarlo.

Tuvo que soportar un viaje de cuatro horas a otro hospital a 400 kilómetros de distancia, en Changsha, Hunan Povince, China. Zhang dijo que le visitaron tres compañeros de clase y que uno de ellos llevó la espada. Pero que no sabe como fue a parar a su cabeza. “Sentía fuertes dolores y una gran cantidad de sangre que corrían por mi cara”, dijo Zhang. Tras 4 horas la espada fue retirada sin tocar arterias del cráneo y nervios principales.


Demente asesinó a su novia y vivía con el cadáver 
Un hombre identificado como Erik Grumpelt, de 35 años, fue detenido y acusado de matar a su novia y convivir con el cadáver durante más de dos meses. El escalofriante hecho sucedió en Arizona. Tras una denuncia del padre del sujeto, agentes de la policía de Mesa fueron al apartamento del sospechoso y hallaron el cuerpo de Melinda Raya, de 39 años, en el piso de un dormitorio y cubierto con sábanas.

El cadáver, en estado avanzado de descomposición, estaba rodeado de desodorantes ambientales, dijo la policía. Según las autoridades, el 19 de mayo Grumpelt golpeó a Raya violentamente en el abdomen al enterarse de que ella le había sido infiel. Luego, preso del pánico al ver que ella no reaccionaba, trató de ocultar el cuerpo.




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